The Guardian anunció que dejará de publicar en sus cuentas editoriales oficiales en la red social X (anteriormente conocida como Twitter), citando preocupaciones sobre el contenido que se promueve en la plataforma, como teorías de conspiración de extrema derecha y racismo. La decisión se tomó luego de evaluar los riesgos de seguir utilizando X y considerar que los recursos destinados a esa red podrían aprovecharse mejor en otras áreas de promoción de su periodismo, informó el medio británico.

En un comunicado, el diario explicó que esta medida ya venía siendo evaluada y que la campaña presidencial en los Estados Unidos confirmó sus inquietudes sobre la plataforma. “X es un medio tóxico y su propietario, Elon Musk, ha podido utilizar su influencia para moldear el discurso político”, expresó The Guardian.

Aunque dejarán de publicar en X, los usuarios aún podrán compartir los artículos del medio en la plataforma y su cobertura de noticias en vivo podría incluir, ocasionalmente, contenido de X dentro de las páginas del sitio web de The Guardian. Además, los reporteros podrán seguir utilizando X como herramienta para la recolección de información, de la misma manera en que lo hacen con otras redes sociales en las que el diario no participa oficialmente.

El diario subrayó que su modelo de negocio, basado en el financiamiento directo de sus lectores, le permite evitar depender de la viralidad y los algoritmos de las grandes redes sociales para difundir su trabajo.

En los últimos tiempos, The Guardian ha expresado su preocupación por los desafíos que enfrenta en el actual ecosistema de medios, el cual describió como dominado por “un puñado de propietarios multimillonarios” y cada vez más marcado por la desinformación y la presión de grupos de poder.

Entre los problemas señalados, el diario británico destacó la propagación de noticias falsas en redes sociales para fomentar la intolerancia, junto a los esfuerzos de equipos de abogados de personas influyentes que intentan frenar la publicación de investigaciones incómodas para sus intereses.

El medio también denunció el impacto de grupos de presión con financiamiento opaco que buscan deslegitimar datos científicos sobre la crisis climática y otros temas respaldados por la ciencia. Finalmente, The Guardian resaltó los riesgos que plantean los regímenes autoritarios que atentan contra la libertad de prensa, dificultando el trabajo de los periodistas y limitando el acceso de los ciudadanos a información veraz y objetiva.

The Guardian es uno de los tantos medios de calidad y prestigio que ofrece su contenido de manera gratuita a sus usuarios.

El comunicado completo

Queríamos informar a los lectores que ya no publicaremos en ninguna cuenta editorial oficial de The Guardian en el sitio de redes sociales X (anteriormente Twitter). Creemos que los beneficios de estar en X ahora se ven superados por los aspectos negativos y que los recursos podrían usarse mejor para promover nuestro periodismo en otros lugares.

Esto es algo que hemos estado considerando durante un tiempo dado el contenido a menudo perturbador que se promociona o se encuentra en la plataforma, incluidas teorías de conspiración de extrema derecha y racismo. La campaña electoral presidencial de EE. UU. solo sirvió para subrayar lo que hemos considerado durante mucho tiempo: que X es una plataforma mediática tóxica y que su propietario, Elon Musk, ha podido utilizar su influencia para moldear el discurso político.

Los usuarios de X aún podrán compartir nuestros artículos, y la naturaleza del reportaje de noticias en vivo significa que todavía ocasionalmente incorporaremos contenido de X dentro de nuestras páginas de artículos. Nuestros reporteros también podrán seguir usando el sitio para fines de recopilación de noticias, tal como utilizan otras redes sociales en las que no participamos oficialmente.

Las redes sociales pueden ser una herramienta importante para las organizaciones de noticias y ayudarnos a alcanzar nuevas audiencias, pero, en este punto, X ahora desempeña un papel reducido en la promoción de nuestro trabajo. Nuestro periodismo está disponible y abierto para todos en nuestro sitio web y preferimos que la gente venga a theguardian.com y apoye nuestro trabajo allí.

Afortunadamente, podemos hacer esto porque nuestro modelo de negocio no depende del contenido viral adaptado a los caprichos de los algoritmos de los gigantes de las redes sociales; en cambio, estamos financiados directamente por nuestros lectores.

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