La Fiscalía allanó un pabellón de la cárcel de Pedro Juan Caballero en busca del autor moral del ataque a balazos de la vivienda de dos juezas. Se incautaron documentos y chips de los reclusos.

La fiscala Mirta Martínez habló este martes sobre cómo avanza la investigación del ataque a balazos contra la vivienda de las juezas Mirna Carolina Ocampos Ramírez y Vivian Carina Quiñónez Vargas, ubicada en Pedro Juan Caballero, Departamento de Amambay.

Martínez señaló en Monumental 1080 AM que, poco después de lo ocurrido, al mediodía del sábado último, procedieron a allanar un pabellón de la Penitenciaría Regional de Pedro Juan Caballero, de donde se incautaron varios documentos y chips, pero no celulares.

Señaló que actualmente se encuentran a la espera de los informes con respecto al análisis de dichos chips, además de esperar los documentos uno por uno, a fin de determinar si la orden de los amedrentamientos salió de la cárcel.

“Aún se desconoce a quién de las dos juezas estaba dirigido el ataque porque ambas tienen causas muy llamativas, por eso estamos mirando cada elemento minuciosamente, pero fue un amedrentamiento”, sostuvo la fiscala.

Recordó que no se descarta que haya estado dirigido hacia Mirna y provenido de Waldemar Pereira Ribas, alias Cachorrão, ya que poco antes del ataque la magistrada integró el tribunal que decretó la rebeldía del hombre.

No obstante, dijo que la jueza tampoco fue la presidenta del tribunal, por lo que no se descartan otras hipótesis vinculadas a otras causas que llevan ambas magistradas afectadas.

La fiscala señaló que actualmente tanto Ocampos como Quiñónez siguen cumpliendo sus funciones, pero con resguardo policial constante. En tanto, lamentó la situación de los jueces y fiscales, quienes trabajan en medio del peligro y “abandonado” por parte del Gobierno.

“El trabajo es difícil y grave. Yo fui atacada hace dos años. A veces nos sentimos solitarios. El Estado nos deja abandonados. Vamos a ver qué pasa con las nuevas autoridades”, manifestó.

El día del ataque

Durante la madrugada del sábado último, dos personas a bordo de una motocicleta efectuaron más de 50 disparos contra la vivienda de Mirna Ocampos, jueza de Sentencia de Pedro Juan Caballero, y de Vivian Quiñónez Vargas, jueza penal de Garantías de Capitán Bado.

Si bien ambas no son hermanas biológicas, crecieron juntas y residen en el mismo domicilio, ubicado sobre las calles Cerro León esquina Iturbe y avenida Carlos Domínguez, del barrio Guaraní de Pedro Juan Caballero.

Según relataron, al momento del ataque, Quiñónez se encontraba en su habitación, cuando escuchó varias detonaciones de arma de fuego. Una vez que acabaron los disparos, fue a verificar y constató los rastros de proyectiles y daños materiales en su casa.

Ambas magistradas aseguraron a los investigadores que no tienen ningún inconveniente con nadie, así como descartaron tener enemigos, por lo que el hecho sucedido les resulta “muy raro”.

 

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