Fueron identificados como el paraguayo Carlos Antonio Gómez Ortiz, de 31 años, y el pasajero Elison de Jesús Martines, de 40 años, residente en Ribas do Rio Pardo. Los cuerpos de los dos fueron calcinados tras el choque y explosión del avión, que quedó completamente destruido por las llamas. Las investigaciones seguirán a cargo de DRACCO, que se encuentra a la espera de que un equipo del CENIPA (Centro de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos), continúe con la investigación de los motivos que llevaron al accidente del avión. Según el delegado de Costa Rica, Jhonny García, además de la Policía Civil, en el lugar se encontraban Bomberos, Policía Militar y Forenses.

“El avión quedó gravemente destruido por el fuego. En un principio no fue posible identificar a las víctimas, solo se pudo determinar que eran hombres”, dijo. Se llamó a los forenses y los cuerpos fueron entregados a la funeraria y luego de ser sometidos a un examen necropapiloscópico para ser identificados. Según la directora de DRACCO, delegada Ana Claudia Medina, equipo de DRACCO, se han realizado todos los peritajes y ya se inició la fase de investigación de las causas del accidente.

“Primero liberamos los cuerpos y tan pronto como los restos del avión se enfriaron, comenzamos el trabajo de investigación. Lo que tenemos hasta ahora es que la aeronave estaba haciendo un vuelo experimental, voló alrededor de 40 minutos en el lugar y el accidente ocurrió cuando aterrizaba”, comentó el delegado.

Fuente: Ponta Pora News