Ayer por la tarde una niña de 5 años fue rescatada por el Ministerio Público y la Defensoría de la Niñez de la Escuela Generación de la Paz de Barrio Obrero. En tanto, la madre dijo estar arrepentida, ya que vio a su hija teniendo una conducta inapropiada y la castigó de sobremanera.

Tras una denuncia ante la Fiscalía por maltrato físico, la defensora de la Niñez, Roseli Echeguren, acudió hasta la institución para cerciorarse de la acusación. Allí se percató que la menor presentaba lesiones. Sin embargo, Echeguren dijo que primeramente deberá pasar por una inspección médica y psicológica, ya que no puede asegurar que dichas lesiones hayan sido por maltrato. 

Agregó que en el momento del rescate, la misma se presentó algo asustada, pero buscaron calmarla. Así también, la defensora indicó que buscarán un hogar que pertenezca a su círculo familiar. Aunque señaló que su padre no reconoció a la niña y hasta ahora se encuentra con paradero desconocido. 

Por su parte, la madre denunciada dio su versión y manifestó que el castigo físico  dado a su hija fue a raíz de una conducta que no le pareció apropiada con un amigo de su edad. En tanto, dijo estar arrepentida tras los golpes. 

"Mi hija desapareció cinco minutos y me dijo que se besaron con su amiguito y de tanta rabia que me dio a mí, perdí el control por eso. No fue un escándalo", explicó. 

Respecto a los golpes que presenta la menor, la mamá comentó que un hematoma en el rostro fue por una caída. Detalló que la lesión en el labio es por una sensibilidad en dicha parte y no por un golpe suyo. 

"El golpe que tiene de su boca, en su rostro es por una caída. Le pegué por su pierna y por su espalda. La denuncia fue por maldad, yo soy una madre que trabaja de mañana, tarde y noche y siempre está conmigo mi hija", indicó.
Finalmente, la madre dijo estar arrepentida, ya que jamás pensó que sus nervios le iban a llevar hasta ese punto. Por lo que espera recuperar la custodia de su hija.