De acuerdo al informe de las auditorías que la Contraloría General de la República (CGR) realizó a todas las entidades centrales y descentralizadas, IPS es el que presentó graves inconsistencias.

Según el informe y dictamen Financiero del Poder Ejecutivo realizado por la Contraloría General De la República, a cargo del contralor Camilo Benítez y el subcontralor, Augusto Paiva, dentro del Instituto de Previsión Social (IPS) se detectaron la presunta inexistencia de bienes por valores millonarias que sí figuraban en los documentos.

Del resultado de la auditoría, se detectó que existen bienes que sufren deterioro y depreciación por no ser utilizados para los fines para los que se adquirieron.

De acuerdo al informe que fue presentado por el Contralor ante los diputados, resultante de un total de cuatro mil auditorías que el ente contralor en uso de sus atribuciones realizó durante el período 2022/2023, se detectó que el IPS cuenta con un inventario de miles de bienes cuyo paradero se desconoce.

“Se detectaron 9.355 bienes que figuraban en Inventario de Bienes de uso como Faltantes de G. 42.915.782.530”, dijo Benítez en su exposición ante el plenario.

Benítez continuó diciendo que el paradero de los bienes es “administrativamente desconocido”.

En su mayoría se trataría de mobiliarios e insumos que no se descarta también sean hospitalarios, si bien en el sumario del informe aún no se dieron detalle de qué bienes se trataría.

En cuanto a obras, el informe da cuenta que hay un total de 25 obras que contaban con actas de recepción definitivas, por la suma de G. 1.122.881.351.987, que siguieron registradas, hasta diciembre de 2022, como “Obras Civiles en Ejecución”.

Agregó que este caso existe una clara desactualización en el balance de lo que son las obras recepcionadas, terminadas y ejecutadas y que “podrían constituir eventualmente una presunción de fraude”.

Siguiendo con las irregularidades detectadas, en los bienes del Centro Residencial Especializado de Atención y Apoyo a Adultos Mayores, se registró por un valor superior a los G.24 mil millones, bienes no están siendo utilizados para los fines propuestos. Por ende, van “depreciándose conforme el paso del tiempo”.

Dentro del control de obras públicas y durante la Fiscalización Especial Inmediata, de una Licitación Pública Nacional en la Construcción y Provisión de Equipos al Hospital Ingavi del IPS, por valor de G. 393.227.000.000, se halló diferencias entre las cantidades certificadas y las realmente ejecutadas, de G. 1.923.362.810 para la licitación de la Construcción del Hospital de Ingavi. En tanto, las diferencias entre las cantidades certificadas y las realmente ejecutadas de G. 1.432.421.473 que tiene relación a la terminación del Hospital Ingavi.

Combustibles. En el uso del carburante se hallaron indicios de mala utilización, alrededor de G. 2 mil millones, sumado la falta de evidencia de 221 tarjetas magnéticas por valor de G. 765 millones, la falta de rendición de cuentas de una persona que cargó por G. 705 millones (74 mil litros en un día) y otra de G. 360 millones de diferencia entre lo que IPS asignó y lo que el personal cargó finalmente.

Se detectaron 9.355 bienes que figuraban en Inventario de Bienes de uso como “Faltantes” dentro del IPS. Camilo Benítez, 
contralor general.

(Datos desactualizados) en los balances podrían constituir eventualmente una presunción de fraude. Camilo Benítez, 
contralor general.

9.355 bienes de uso figuran como “faltantes” en el IPS y su paradero es administrativamente desconocido, según CGR.

42.900 millones de guaraníes es el valor de los bienes cuyo paradero se desconoce. Serían mobiliarios, insumos.

 

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