El ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, fue apartado del cargo tras reconocer que tuvo trato con el narcotraficante brasileño Marcus Vinicius Espíndola Marques de Padua. En su reemplazo fue designado el embajador Federico González. En tanto, la ministra Cecilia Pérez fue nombrada asesora en Asuntos de Seguridad de la Presidencia.

El ministro del Interior Arnaldo Giuzzio fue destituido de su cargo luego de confesar vínculos con el narcotráfico.

La información fue confirmada por el jefe de Gabinete Hernán Hutteman en una conferencia de prensa esta martes. Esto como consecuencia de la confesión de Arnaldo Giuzzio, quien hoy en una entrevista confirmó que el narcotraficante brasileño Marcus Vinicius Espíndola Marques de Padua -detenido hace una semana en Foz de Iguazú y cuya esposa, Jussara Cabral, es accionista de Tabesa SA- lo visitó el año pasado para ofrecerle implementos de seguridad a través de su empresa, Black Eagle SA.

Si bien Hutteman no quiso decir abiertamente que Giuzzio fue destituido, se limitó a usar la diplomacia y afirmar que “el presidente lo sacó del cargo y nombró a Federico González en su lugar”.

Así, el presidente recurre una vez más a Federico González para un cargo de confianza, Recordemos que González anteriormente ya ocupó los cargos de canciller nacional, director de Itaipú, jefe de Protocolo y director de Asuntos Estratégicos. Es una suerte de “comodín”, de la Presidencia.

Mañana miércoles en Palacio de Gobierno asumirá oficialmente el nuevo ministro del Interior.

Al asumir el cargo, Federico González sostuvo que las investigaciones se profundizarán hasta determinarse qué exactamente sabía el equipo de Arnaldo Giuzzio sobre narcotraficantes. González sostuvo que se investigarán las últimas denuncias que hacía el exministro cuando aún estaba al frente de la cartera Interior.

Por su parte, la hasta ahora ministra de Justicia Cecilia Pérez, quien asumió como asesora de Asuntos de Seguridad, señaló que tiene instrucciones de volverse estricta en mecanismos para evitar que grupos vinculados al crimen organizado puedan infiltrase en el Estado de otras maneras.

La comunicación sobre quién asume el ministerio de Justicia se realizará en la brevedad.

Sobre el comandante de la policía Nacional, la información que oficializaron es que por de pronto continúa en el cargo, aunque siempre se evalúa su desempeño.

Además, el hasta hoy ministro del Interior contó que alquiló un vehículo de otra de sus empresas en diciembre de 2021 porque el suyo se había averiado. Alegó que cuando se realizó la verificación de sus antecedentes, Espíndola estaba “limpio”.

“Le conozco a este señor desde el año pasado, nos ofreció materiales balísticos, chalecos, vehículos blindados también (...) Inclusive había presentado una exhibición de sus chalecos, fue particular. Invitamos a otros referentes de la Senad, Policía, hicimos un chequeo de la empresa en Paraguay; todo aparentaba normal. Recibimos a esta empresa como a tantas otras empresas”, declaró Giuzzio hoy con llamativa sinceridad.

No obstante, Giuzzio aclaró que “el contacto no pasó de eso”, y que si el hombre llegaba a convertirse en proveedor del Estado, “sí se iba a profundizar el análisis sobre el proveedor”, añadió el entonces ministro.

Justamente, la semana pasada también se conoció que la esposa de Espíndola Marques de Padua, Jussara Cabral, es accionista de Tabacalera del Este SA (Tabesa), propiedad del expresidente Horacio Cartes, investigado por contrabando y lavado de dinero.

En otro momento de su extraña confesión, Giuzzio señaló que cuando se enteró de que Marcus Vinicius Espíndola Marques de Padua fue detenido la semana pasada en el Brasil, lo comentó “de forma jocosa” con la ministra de la Senad, Zully Rolón.